¿Alguien está realmente asombrado? Indignado claro que sí, pero asombrado… Lo que esta investigación periodística revela es lo que medio mundo sospecha mientras la otra mitad intenta ocultarlo.



Olviden lo de WikiLeaks, esta vez es muchísima mayor la cantidad de filtraciones. Son más de once millones de documentos que dejarían muy mal parados a unos 140 políticos  -entre ellos 12 líderes mundiales actuales o retirados-, a sus familiares y amigos de sus familiares...



Tras la noticia, que han revelado un centenar de medios de más de setenta  países, han llegado en cascada los desmentidos, y también algunas amenazas de demandas contra los periodistas.



Lo más indignante y asqueroso que revelan los “papeles de Panamá” es la hipocresía inconmensurable de algunos mencionados que hasta ayer iban de manifestación en manifestación o de cumbre, pidiendo que el poder redistribuya la riqueza como Dios manda e implorando que seamos más generosos y solidarios.



Eso no tiene perdón de Dios. Ni de nadie.







L.G