A un mes del brutal asesinato de  Griselda Blanco, la periodista correntina hallada muerta en su casa de Curuzú Cuatiá, aún se esperan los resultados más importantes para determinar el curso de la causa.

El único detenido y principal sospechoso es Darío Holzweissig, un empresario de la noche, dueño de un boliche de Corrientes, con quien la víctima tenía una relación, primero comercial y después íntima, y a quien ella había denunciado públicamente a través de su programa de noticias.

Las pruebas en contra del acusado son muchas, pero la familia de la víctima asegura que varias pericias sobre los elementos recabados, que podrían ser importantes para la causa, aún no fueron entregadas a la fiscalía.

El miércoles, el equipo de abogados de la querella presentó un escrito ante la Justicia para que se informe todo el material que está faltando, haciendo que se demore la investigación. “Detallamos en una lista todo lo que no se entregó hasta el momento. De las pruebas científicas no tenemos absolutamente nada”, le dijo la abogada Andrea Tribbia a TN.  

“Si comparás con el caso Silvia en Chaco, de muchas de las pericias importantes ya se conocen los resultados, y nosotros acá seguimos esperando".

“Todo lo que tiene que ver con el análisis de los elementos hallados en la escena y los elementos secuestrados en la casa de Holzweissig. En general, todo lo que son ese tipo de pruebas, seguimos con el mismo material que teníamos hace 25 días. Todo, intercambio de llamadas y mensajes, que es bastante para analizar, pero necesitamos seguir con otro tipo de material, y no llega. Estamos ahí, esperando”

“Necesitamos pruebas importantes, la de ADN sobre todo, la del material genético que tenía en las uñas, en el cabello, los hisopados que se han hecho. Había rastros de cabellos que estaban en la mano izquierda de la víctima, aún no se conoce la información, y son superimportantes porque nos darían el panorama de si estamos hablando de una persona, de dos personas, y nos ayudaría a determinar la mecánica un poco más”.

Según precisó la letrada, “los elementos probatorios son suficientes” para que el presunto femicida sea condenado, pero sostiene que deben tener los resultados para poder pedir el cambio de carátula de homicidio simple, a femicidio agravado por alevosía, que tiene como pena la prisión perpetua

“Para nosotros sí o sí tiene que ir como femicidio, porque el material que nosotros tenemos creo que es sobreabundante para demostrar que realmente hubo femicidio, que realmente hubo una situación de violencia contra la mujer propiciada por un hombre”.

Advirtió que en las llamadas telefónicas “que eran bastante extensas, se puede ver la dependencia emocional que tenía esa mujer con ese hombre.

Hay un montón de cuestiones que para nosotros no hay dudas, a esta instancia podemos afirmar, sin ningún tipo de aditamento, que realmente hablamos de un femicidio”, dijo.