La Policía caratuló el hecho como ‘suicidio’, y descarta cualquier otra hipótesis. Es que algunas versiones relacionaban al infortunado docente con la muerte de Iván Acuña, ocurrido en la localidad del interior el 24 de enero pasado. Soto, según esa versión, habría sido testigo presencial del hecho, lo que fue desmentido por familiares y allegados







La información policial que sigue la línea del suicidio, indica que Soto tenía problemas particulares y eso llevó a tomar tan drástica determinación.



Desde la misma fuerza, según lo informó Felipe Chávez, se recalcó que el profesor mercedeño nunca había sido convocado a declarar por el caso del joven muerto tras un ataque violento en la ciudad del interior provincial.



Una u otra investigación no hace más que ahondar en las dudas. Los problemas del profesor surgirían a partir de apremios económicos que se originaron, se dice, por la construcción de una casa. Desde su entorno se insiste que justamente esa casa propia era el sueño y el objetivo de Soto y su familia, por lo que consideran “inaceptable” que ese sea el motivo que lo llevó a la muerte.



Lo cierto es que no hay datos concretos, y tal lo dicho, la Policía casi cerró la investigación.





El hallazgo

El hallazgo se produjo el sábado cerca del mediodía en un establecimiento frente al golf Club de Mercedes, al cual se accede por una ruta que conduce a Solari.



El cuerpo fue avistado por un grupo de policías que realizaba el operativo de rastrillaje. Pendía de un árbol. Se realizaron las tareas de peritaje, y el cadáver fue trasladado a la morgue judicial a fin de practicarle la autopsia.



La noticia del lamentable suceso causó una gran conmoción en la comunidad de esa localidad y en la familia que aún no salen de su asombro. Su esposa manifestó a la Policía que Soto andaba depresivo debido a un problema económico.

El docente estaba finalizando la construcción de su casa en la calle Alvear. Afirmaron que tenía planeado mudarse en unas pocas semanas, ya que en la vivienda donde residía junto a su esposa y tres hijos era alquilada.



Desaparecido

Cabe recordar que el profesor desapareció el viernes a la mañana de su vivienda ubicada por calle  Fray Luis Beltrán 743 casi Chacabuco.

Alrededor de las 5.30, Soto salió a sacar la basura a la calle, mientras que su esposa, Fabiana Cherrey alistaba a sus tres hijos para asistir  a la escuela.

Pasaron los minutos y como el docente no regresaba, la mujer salió a la vereda. Al no encontrarlo comenzó a buscarlo y la desesperación aumentó cuando recorrió toda la casa y no lo halló.



Preguntó  a los vecinos y a familiares pero nadie supo decirle dónde estaba. Es por eso que recurrió a la Policía donde realizó una exposición. Al momento de la desaparición, el profesor vestía una  bermuda clásica de gabardina gastada color beige, una remera blanca de cuello redondo y alpargatas blancas. En su poder no tenía ninguna documentación.





L.G