La ilusión de jugar un Mundial no reconoce edades. Y hoy puede ser un gran día para los pibes argentinos, acá en Arequipa. Porque podría quedar confirmada su clasificación a la Copa del Mundo Sub 20 que se jugará en Colombia entre julio y agosto próximo. El pasaje, vale decirlo, parece estar abrochado porque no sólo seis puntos separan al colista Chile de Argentina en la tabla del hexagonal, también hay una brecha de siete goles de diferencia. Por eso, la confirmación llegaría recién hoy. Si Chile no triunfa ante Colombia en primer turno o Argentina suma puntos ante Uruguay, el equipo tendrá su plaza asegurada en la máxima cita juvenil.

Y de esta veintena de pibes que está en Perú hay nueve que compartieron la experiencia de vivir el Mundial de Sudáfrica 2010 como sparrings del combinado que por aquel entonces dirigía Diego Maradona. Ellos no se cansan de repetir lo inolvidable que aquel viaje fue para ellos y lo mucho que aprendieron desde lo profesional y desde lo humano. Y también, claro, las anécdotas empiezan a brotar.

Leandro González Pirez, el firme central de River, cuenta: “Fue algo increíble poder jugar con esos jugadores. Te da rodaje, experiencia y te sirve muchísimo para la carrera. Además había muchachos muy amenos que se acercaban a nosotros, nos hablaban y hasta contaban chistes”. El goleador Facundo Ferreyra coincide: “Jugábamos mucho al ping pong con Palermo, Higuaín, Clemente Rodríguez, Pastore. Fue una experiencia única”. También abundaron las fotos de recuerdo. Por caso, Michael Hoyos guarda con especial cariño las que se sacó con Maradona, Agüero y Samuel. Ni que hablar el recuerdo que le dejó Diego a Juancito Iturbe: “Fue un sueño poder conocer a Maradona, sentí un respaldo enorme de su parte. Aprendí un montón de esa experiencia en Sudáfrica”.

El capitán de este seleccionado, Germán Pezzella, revela: “El único gol que le marcamos a los titulares lo metió Chucky Ferreyra, justo antes de jugar contra Alemania”. El subcapitán Hugo Nervo agrega: “Cada partido éramos hinchas. Hacíamos bastante ruido en las tribunas”. De hecho son varios los que coinciden en que el momento más emotivo se dio en Polokwane, cuando Palermo anotó ante Grecia.

Otro que estuvo en la odisea sudafricana es Nicolás Tagliafico, quien trata de ver más allá de la pelota: “Viajando conocés otra gente, su forma de vivir. Además de lo deportivo, lo humano es impresionante”. El lateral de Banfield, además, ya jugó un Mundial. Junto a otros tres miembros de este plantel (Ezequiel Cirigliano, Sergio Araujo y González Pirez) jugó la máxima cita con la Sub 17, en Nigeria 2009. “Está bueno conocer rivales de Europa. Jugamos con Alemania, también contra Estados Unidos. Quedamos eliminados en octavos contra Colombia en un partido increíble. Jugamos en Abuja, una ciudad que muestra una cultura y costumbres diferentes”.

Historias mundialistas que vivieron nueve de estos veinte pibes que, acá en Perú, devolvieron a Argentina, el mayor campeón de la categoría, a un Mundial Sub 20, luego de la ausencia en Egipto 2009. Y esa experiencia les servirá para sostener el gran sueño: conseguir en Colombia el séptimo título mundial en la categoria.