La Municipalidad de Corrientes continúa con los controles en los locales comerciales que se ubican en diversos puntos de la Ciudad. Durante el sábado 6 de septiembre, se llevó adelante la clausura preventiva de la hamburguesería “El Pibe de Oro”, ubicado en Arturo Frondizi.



Estas tareas son desarrolladas diariamente por la Secretaría de Ambiente, a través de la Dirección General de Control e Inspecciones y se enmarcan en las políticas de regularización que ejecuta la Comuna con el fin de garantizar el funcionamiento de los negocios.



En esta oportunidad, los encargados  de “El Pibe de Oro”  no pudieron acreditar la habilitación comercial y se detectó la venta de bebidas alcohólicas fuera del horario permitido (pasada las 23). Además, mesas y sillas ocupaban parte del espacio público sin autorización municipal.



En cuanto a las medidas de seguridad, el local presentaba los extintores vencidos y no tenía el certificado de prevención contra incendios. Asimismo carecía de luces de emergencia y detectores de humo y gas, requisitos necesarios para su correcto funcionamiento.



Por otra parte, los inspectores comunales al revisar la cocina observaron falta de higiene generalizada en paredes, pisos y techos; los utensilios como la freidora, plancha y mesada, presentaban un conglomerado de grasa no apto para su uso.



Desde la Dirección General de Control e Inspección, informaron que el dueño de la hamburguesería se negó al decomiso de mercadería como ser carne molida que estaba en contacto con otros elementos, papas fritas conservadas en una caja de vino, entre otras.



Por todos estos motivos, los agentes dependientes de la Dirección General de Control e Inspección procedieron a colocar la faja de clausura preventiva del local.