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Mediante el trabajo coordinado de técnicos y funcionarios municipales de la Secretaría de Desarrollo Productivo y Economía Social, se desarrolló un operativo de provisión de alimentos para los barrios afectados por la creciente de río Paraná.



Desde el área, se asistió en la provisión de alimentos permanentemente a todos los centros de evacuación. Para esto se compraron 450 kilos de carne de abastecedoras locales, junto a 1288 kilos de verduras: 240 kg de zanahorias, 320 kg de cebollas, 248 de papas, y 480 de zapallos, provenientes de las huertas de productores periurbanos. Además de la provisión de alimentos se realizó el preparado de la comida, con la implementación de ollas populares en los distintos barrios.



Las tareas fueron coordinadas por el secretario del área, Diego Ayala, junto a técnicos y funcionarios de las distintas direcciones como Carlos Sánchez, Lucía Domínguez y personal de la Dirección de Agricultura Periurbana.



Además, en conjunto con agrupaciones estudiantiles Agrupación alternativa universitaria Derecho UNNE y miembros de la Juventud Sindical, se clasificaron y distribuyeron indumentarias donadas por la población.



Se asistió principalmente a los barrios: Río Paraná, Tosquera y  Piedra Colorada en cuestiones operativas, de acondicionamiento de lugares de evacuación y el acompañamiento a los vecinos afectados. En cuanto a los alimentos, la secretaría cubrió el total de la demanda de todos los barrios y zonas afectadas que estableció el municipio.



Además, en la fábrica de tubos municipal del barrio Río Paraná se construyeron 8 box para vivienda de evacuados, y se realizó un relevamiento de familias en peligro de inundación, realizando el acondicionamiento en la planta alta de algunas viviendas en los casos donde los ciudadanos no querían evacuarse.



Además de la asistencia alimentaria a los centros de evacuación, desde la Secretaría de Desarrollo Productivo y Economía Social se proveyó a 25 familias afectadas de los barrios Tosquera, Rìo Paranà y Tierra colorada con: desayuno, almuerzo, merienda y cena, junto a 80 personas de esos barrios que también se acercaron a las ollas populares dispuestas por el Municipio, que continúan vigentes.



Paralelamente, se destinaron 300 kg de alimento balanceado para sostener la producción de los habitantes de la Isla El Talar.