Dos jóvenes que pedían “rescate” por un teléfono celular robado fueron detenidos en la capital de Corrientes cuando esperaban a una mujer, víctima del delito, que “acordó” llevarles el dinero pretendido. Las capturas son el resultado de un plan bien ideado por un grupo de policías apenas la damnificada los alertó de que ambos delincuentes la habían contactado a través de su propia cuenta de “WhatsApp”.



La historia comenzó hace algunas semanas cuando una chica de 20 años estaba en un evento festivo en el Sindicato de Empleados de Comercio, en Ruta Nacional 12 y avenida Libertad.

Sin notar a los ladrones la joven sufrió la sustracción de un celular “Sony Xperia”, aparato con el que días más tarde comenzaron a mandarle mensajes al teléfono de su madre.

En las conversaciones ambos malvivientes dejaron en claro que sólo “devolverían” el celular si obtenían dinero a cambio. La cifra mencionada era de 600 pesos.



La muchacha relató los detalles a personal de la comisaría Octava. Estos acordaron con ella que debía seguirles “la corriente” a los desconocidos y pactar un encuentro.

De tal manera, la cita quedó fijada para realizarse en la esquina de la avenida Cazadores Correntinos y Las Piedras.



Fuentes del caso dijeron a época que en ningún momento se expuso a la mujer, puesto que ella, si bien dijo a los extorsionadores que iría, no lo hizo y nada más ofició como “señuelo”.



Antes de darse el falso encuentro la chica pidió a los delincuentes algunos detalles como para reconocerlos. Y éstos, bastante incautos o demasiado confiados, dieron precisiones de la vestimenta que llevarían e inclusive del color de la moto en la que circulaban.



Con toda esta información policías de civil, pertenecientes al grupo de Investigaciones de la Octava, hicieron vigilancia bien disimulada. Apenas instantes posteriores a aparecer en la mencionada intersección los sospechosos resultaron sorprendidos.



Los acusados del robo y extorsión tienen 17 y 19 años, éste último identificado como Julián Andrés Pinto. Son del barrio 17 de Agosto. Andaban en una motocicleta Ghiggeri 110 sin chapa patente y efectivamente llevaban el teléfono de la joven. La causa caratulada como “hurto y tentativa de extorsión” pasó a manos de la comisaría seccional Novena, ya que en esa jurisdicción fue cometida la sustracción del aparato de comunicación.





L.G