En múltiples procedimientos que la Policía realizó en los últimos dos días fueron detenidos cuatro hombres acusados de formar parte de una banda dedicada a la sistemática sustracción de motocicletas en la ciudad de Corrientes.



Como resultado de seis allanamientos en diferentes barrios han sido recuperados algunos vehículos enteros y otros ya desarmados.

A partir de estas capturas la fuerza provincial informó que estaría desbaratada gran parte de una organización que presuntamente robaba entre uno y dos vehículos por día.



Efectivos de la Dirección de Investigación Criminal (DIC) realizó una catarata de operativos desde anteanoche cuando en el centro de la ciudad demoraron a dos jóvenes de 22 y 24 años, de apellidos Vandecabeye y Balcazar.



La captura de estas personas ocurrió apenas los policías confirmaron que la moto en la cual circulaban, una Yamaha YBR 125, existía un pedido de secuestro dado que fue robada en jurisdicción de la comisaría Decimonovena.



Basada en esta situación puntual la DIC amplió una pesquisa que ya estaba en marcha. De tal forma establecieron una serie de domicilios adonde los sospechosos llevaban, escondían y desarmaban motocicletas.



El primero de los operativos avalados con órdenes judiciales se produjo en calle Braille al 4200 (continuación de Rivadavia) del barrio Villa García. Allí dieron con una Motomel 110 que sería uno de los vehículos usados por los detenidos para salir a cometer sus atracos. Viviendas de los barrios Laguna Seca e inmediaciones al complejo habitacional 1000 Viviendas también fueron revisadas.



Pero en otro lugar, precisamente en Medrano y Cabrera, también del barrio Villa García, es donde ayer a la mañana ubicaron varias motos buscadas. Parte de esos vehículos estaban desguazados por completo y otros no tenían el motor. Allí también los policías se incautaron de una escopeta tipo Itaca calibre 12, un revólver calibre 44 y decenas de cartuchos.



“Hasta el momento hay cinco casos aclarados porque se recuperó las motos que figuran denunciadas como robadas. Igual el trabajo investigativo continúa para determinar si estas personas están involucradas en otros hechos”, resaltó una fuente de la causa.



En principio estaría establecido que tanto Vandecabeye como Balcazar eran los encargados directos de “levantar” las motocicletas (de la vía pública o bien de propiedades privadas) con distintas modalidades para transportarlas a determinados domicilios donde aguardaban los “reducidores”.



De los cinco robos aclarados hasta el momento dos ocurrieron con la metodología más violenta: la de asaltos a mano armada en las cuales sus víctimas sufrieron intimidaciones de muerte e incluso golpizas.

Uno de esos atracos fue padecido por una pareja de novios en el barrio Doctor Montaña, donde el 14 de octubre a la noche los emboscaron cuatro malvivientes en calle Roberto Giusti casi avenida Maipú.



Ese día, los damnificados cayeron al suelo al ser empujados con el vehículo en movimiento.



Pocos días antes, en la noche del jueves 11 de octubre, un hombre de 36 años transitaba en una Yamaha YBR 125 cuando en calle Yugoslavia esquina Palermo del barrio Nuestra Señora de la Asunción salieron a su paso tres sujetos en dos motos portando un arma de fuego.



“Me resistí, pero montó el arma y estaba por tirar. No me quedó otra que entregarle la moto. Eran tres, todos con gorritas, y andaban en dos motos 110. Me pidieron mi moto, pero no quería entregarles. Hasta que tuve que hacerlo”, fue el crudo testimonio aportado por la víctima.



Ante ambos casos, la Policía sospechó que los autores formaban parte de una misma banda que en su haber tendría otros golpes cometidos con esta modalidad.



Tal como diario época lo anticipó hace un par de semanas, esos episodios resultaron como disparador de una investigación tendiente a desbaratar la organización criminal que ahora estaría desarticulada.

Los procedimientos continuaban y no descartaban nuevas detenciones.



L.G