"Las autoridades necesitan tomar medidas decisivas para liberarse de la crisis", sostuvo, y agregó que hay "menos de tres meses" para salvar el euro. De este modo, respondió a la estimación que había hecho el millonario George Soros, que había afirmado que Europa tenía sólo tres meses para salvar su moneda.

"La construcción de la eurozona ha llevado tiempo y es un trabajo en construcción en este momento -dijo Lagarde-. En este momento es una obra en construcción."

Respecto de la posible salida de Grecia del euro, se limitó a señalar que "va a ser una cuestión de voluntad y de determinación política".

Al referirse a Grecia, Lagarde pidió perdón por sus declaraciones sobre la evasión y explicó que sus comentarios fueron tomados "de forma enardecedora, y supusieron una ofensa".

"El cumplimiento tributario es algo necesario para restaurar la situación de cualquier país, entre ellos Grecia", manifestó. "Se necesita reducir el déficit fiscal de manera gradual y constante -explicó Lagarde-. No tiene que ser a la manera de apretarse el cinturón, como todo el mundo dice, pero sí ser consistente."

Posteriormente, en un discurso sobre la próxima cumbre de medio ambiente Río+20, la jefa del FMI dijo que Europa necesita una estrategia adecuada para la estabilidad y el crecimiento, "donde la estabilidad conduzca al crecimiento y el crecimiento facilite la estabilidad".

Para Lagarde, las autoridades deberían tener como objetivo una combinación de políticas monetarias "muy flexibles", el uso de recursos comunes para ofrecer respaldo directo al sector bancario y el impulso de políticas que fomenten el crecimiento.

La crisis de la zona euro se intensificó desde el mes pasado, a medida que los inversores perciben como una posibilidad cada vez más cierta que Grecia abandone el euro. Ante la grave crisis financiera que sufre España, Bruselas acordó el sábado un rescate de 125.000 millones de dólares para los bancos españoles.

Lagarde insistió en que era crucial que las economías avanzadas tracen planes creíbles para reducir la deuda. "Sin un plan de este tipo, los países podrían verse obligados a hacer pronto ajustes mayores", advirtió. Y subrayó que las economías en desarrollo se están sosteniendo relativamente bien, "pero podrían enfrentar un enfriamiento si las condiciones globales empeoraran".