Con la llegada del coronavirus, los síntomas fueron variando. Sin embargo, la pérdida de olfato y gusto son dos de los principales. Por eso, varios estudios científicos se enfocan sobre su desarrollo, la durabilidad y modos en que se puede recuperar ambos sentidos.

Como consecuencia del SARS-CoV-2, se produce la pérdida súbita de olfato dado que el virus ingresa por las fosas nasales y entra en contacto con el epitelio olfatorio. En un estudio realizado en noviembre 2020, se identificó que la disfunción olfativa se presentó en el 85,9% de los casos leves y de 6,9% en casos graves.

Por otra parte, las papilas gustativas también se ven afectadas dado que no se realiza el envío de información vinculada al sabor hacia el cerebro, indicó Stella Cuevas, ex presidenta de la Asociación de Otorrinolaringología de la Ciudad de Buenos Aires.

En cuando a la durabilidad en la pérdida del olfato o gusto, una investigación descubrió que el 72% de los casos analizados recuperaron los sentidos un mes después de haberse infectados.

Sin embargo, también se registraron casos donde los síntomas duraron por más tiempo e incluso puede producir otras consecuencias. Entre ellos, la parosmia que implica el sentir olores desagradables y distintos a los recordados.

Frente a dicha situación, los científicos aún estudian sus características, en especial, el modo de recuperar el gusto y olfato. Un estudio reveló la posibilidad de realizar ejercicios donde se debe prestar atención a las características distintivas de un estímulo. Sin embargo, también se reveló que no funciona con todos los pacientes.